Sobre el rencor
Sobre el rencor
El que se venga será víctima de la venganza del Señor,
que le pedirá cuenta rigurosa de sus pecados,
Perdona la injuria a tu prójimo,
y entonces, si suplicas, te serán perdonados tus pecados,
Si un hombre alimenta rencor: contra, otro
¿cómo podrá pedir al Señor perdón?
Si no tiene misericordia de su semejante,
¿cómo podrá suplicar por sus pecados?
Sí siendo carne guarda rencor ¿quién le va a perdonar sus pecados?
Acuérdate de tu final y deja el odio.
Acuérdate de la corrupción y la muerte,
y guarda los mandamientos.
Acuérdate de los preceptos, y no odies al prójimo;
acuérdate de la alianza del altísimo y pasa por alto la ofensa;
Aléjate de las querellas y evitaras pecados,
porque el hombre iracundo las atiza;
El pecador siembra la discordia entre los amigos,
y en medio de los que viven en paz lanza su calumnia.
El fuego arde según el combustible;
y la disputa se propaga según su violencia;
la ira de un hombre depende de su fuerza,
y su cólera se levantará según su riqueza
Pendencia súbita enciende el fuego,
y la riña irreflexiva hace correr la sangre.
Si soplas sobre una brasa, se encenderá;
pero si la escupes, se apagará;
y, sin embargo, ambas cosas salen de tú boca.